sábado, 18 de noviembre de 2006

"La muerte es amarillo limón y huele a vainilla"


El marido de la peluquera. Buen título que resume en tan solo cinco palabras el argumento de esta pequeña película que consideraría discreta y austera de la directora Patrice Leconte. Es una cinta sin pretensiones, donde se muestra lo que se tiene que mostrar del modo más sencillo posible. La película transcurre principalmente en dos escenarios: una peluquería francesa y una playa. Hay dos personajes principales, Antoine (Jean Rocherfort) y Mathilde (Anna Galiena). Con esos simples elementos se nos muestra una historia de amor singular. Antoine, con tan solo 12 años, se encapricha de una peluquera de su barrio. Un buen día, decide que de mayor se casará con una peluquera. Y bien, a partir de aquí, sucede todo. Atención a la escena de los combinados de colonia, las danzas moríscas del protagonista y el sorprendente final. La película incluye banda sonora de Michael Nyman, aunque en esta ocasión no aporta nada nuevo ni sorprende con su música.

Desde mi punto de vista, no es una cinta para todos los públicos. El ritmo es pausado, como la vida misma. No ocurre acción trepidante ni nada semejante. Recomendable para todos aquellos que quieran ver algo diferente en este marco cinematográfico que nos rodea hoy en día.


Cuando sea mayor me casaré con una peluquera.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Una pequeña apreciación, se trata del dorector Patrice Leconte, no directora, saludos!